Este 31 de diciembre, Petroperú paralizará todas las operaciones de refinado de petróleo para la producción de derivados que realiza en la refinería de Talara, durante un periodo de 15 meses, para dar paso a su adecuación a una nueva refinería con mayor capacidad de producción. Pero la paralización no afectará el suministro de combustibles ni debería afectar sus precios, afirmó el presidente de la empresa, Carlos Paredes.

El titular de la petrolera estatal explicó que, durante el periodo de cierre, no van a dejar de suministrar los productos de los que hoy abastecen al mercado local, pues los que dejen de producir como resultado del cierre de la refinería, los importarán.

“(El suministro) está totalmente asegurado. Petroperú no va a dejar de suministrar el volumen de combustibles que ha venido proveyendo. Nosotros venimos importando combustibles desde hace mucho tiempo, y comercializando localmente. No es que lo que comercialicemos sea solo de Talara”, remarcó.

Además, descartó que, por el hecho de que la petrolera estatal tenga que importar todo el combustible que demanda su actual mercado, eso implique aumentar sus precios ex planta. “El precio de los combustibles refleja el costo de la materia prima, el pago internacional, y no porque dejemos de refinar va a subir el precio”, subrayó.

Vía Gestión

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