El presidente de Petroperú, Carlos Paredes, confirmó que este 31 de diciembre la antigua refinería de Talara paralizará sus operaciones para dar paso a su adecuación a la nueva refinería que se construye en el mismo lugar para aumentar su capacidad de refinación.
El funcionario estimó que la parada de actividades de la planta tendrá una duración de 15 meses, es decir hasta la puesta en marcha de la nueva refinería que -aseveró- será a finales del primer trimestre del año 2021. Paredes estimó que la suspensión de las operaciones de la refinería le significará a Petroperú el dejar de recibir ingresos por un aproximado de entre US$ 70 y US$ 90 millones en el mismo periodo.
En esa línea, indicó que el contrato que Petroperú ha firmado con PetroTal para la compra de la producción de crudo del lote 95, le permitirá a la petrolera estatal compensar en parte las pérdidas generadas por la paralización de actividades de la refinería de Talara.
“Lo importante es que nosotros hagamos nuevas cosas, como la que estamos anunciando con este cierre (de contrato de compra de petróleo con PetroTal), que nos permiten compensar y seguir para adelante. Tenemos que ser más eficientes en épocas difíciles, hay que volverse más creativos e innovadores, y eso es lo que estamos haciendo”, señaló Paredes.
Además, indicó que la petrolera del Estado tiene que seguir generando ahorros en la empresa, y que por lo pronto su gestión presentará en breve los resultados del 2019, en lo que, indicó, se verá que se ha logrado incrementar de manera significativa sus resultados, incluidas sus utilidades netas. “Venimos haciendo una serie de mejoras en la gestión, y hay aumento de utilidades en el 2019”, apuntó.
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