Estados Unidos fue, es y seguirá siendo una potencia global, por la constante innovación tecnológica que genera y por el pujante marketing que practica. El fracking para producir shale gas y shale/tight oil es otro reciente avance tecnológico estadounidense.
Este traspase tecnológico ha cambiado el perfil de la industria de hidrocarburos en el planeta y, en particular, de la economía norteamericana. Sobre todo, ha apoyado a mejorar notablemente su déficit comercial. EE.UU. tiene el 19% del total mundial de los recursos técnicamente recuperables de shale/ tight oil y el 8% del total mundial de shale gas, y es el único país que ha logrado producción masiva y económica hasta el momento. La producción de shale gas competitivo comenzó a ser realidad en el 2001/2002 y el petróleo en el 2005/2006.
Las importaciones de petróleo (1985) fueron de 5 millones de barriles por día (MMBbld) y subieron en el 2006 a 14 MMBbld (crecimiento anual de 8%), cuando irrumpe el fracking. Sin el fracking, las importaciones se hubieran situado en aproximadamente 19 MMBbld en el 2017, pero se redujeron a 10 MMBbld. Este ahorro en importaciones, a un precio real promedio de US$ 75.2/barril (WTI) resulta en ahorros de aproximadamente 976 billones de dólares (BUS$).
Si agregamos las exportaciones incrementales de petróleo por el fracking entre el 2007 y el 2017 (crecimiento anual de 16%), se calcula que se generaron 376 BUS$. El balance positivo del petróleo a favor del déficit comercial por menos importaciones y más exportaciones de petróleo es por lo tanto de 1,352 BUS$.
El mismo análisis para el gas natural es posible a partir de la radical reducción de importaciones a partir del 2007. El crecimiento promedio anual de importaciones entre 1986 y el 2007 fue de 24% anual. Por lo tanto, el ahorro por importaciones no realizadas en el periodo 2007 a 2017 fue de 115.7 BUS$. Precio promedio real de US$ 7/MMBTU (marcador NBP).
Nuevas y crecientes exportaciones de gas natural despegan a partir del 2002 a México y Canadá por tubería, y en gran escala, a partir del 2015, por GNL al mundo. El incremento por exportaciones adicionales a un precio promedio real de US$ 5.5/MMBtu (promedio marcador NPB/Europa y Henry Hub/USA) generó, aproximadamente, 89.5 BUS$. La reducción de importaciones y nuevas exportaciones de gas natural suma 205.3 BUS$.
La balanza comercial a favor de EE.UU. por el fracking ha sido aproximadamente de 1,558 billones de dólares en estos 16 años. Y esto recién comienza. La producción de petróleo y de gas natural continuará incrementándose.
Lo que es significativo resaltar es que el anterior análisis no toma en cuenta la cuantiosa generación de servicios altamente tecnológicos y mano de obra que se ha generado. Tampoco los royalties pagados por miles de productores a los ciudadanos norteamericanos. Tampoco incorpora la pujante industria petroquímica que se viene concretando y nutridísimos beneficios económicos adicionales. A los latinoamericanos debería invadirnos una profunda nostalgia y sana envidia.