• Pluspetrol informó que paralizará operaciones en Camisea del 26 de julio al 17 de agosto del 2018. El MEM está coordinando con la petrolera, Osinergmin, el Coes y TGP para fijar la disponibilidad de gas natural en ese lapso.
  

El cambio del software de seguridad que opera desde el 2004 y que está entrando a su período de obsolescencia obliga a veintitrés días de paralización completa. Pluspetrol advirtió que si cambian los sistema de seguridad en la fecha prevista, pondrían en riesgo la integridad de la planta Malvinas y de la producción de gas y líquidos. Hay que recordar que el gas natural de Camisea sustenta el 45% de la generación eléctrica, el 100% del proceso de masificación del gas natural y el 85% de la producción de GLP.

¿Racionamiento?
La parada de planta ha sido programada para Fiestas Patrias, es decir, justo en el período de estío (temporada seca), lo cual crea un problema para el sector eléctrico. En efecto, sin agua para generación hídrica y sin gas para generación térmica, el Comité de Operación Económica del Sistema Interconectado (COES) deberá recurrir a todas las centrales de petróleo diésel disponibles.

César Butrón, presidente del COES, explicó que su entidad se ha comunicado con todas las empresas que operan a diésel para que alisten sus equipos. Advirtió que hay algunas centrales que no podrán producir a toda su capacidad, pero aun así no habrá problemas de racionamiento eléctrico. Si bien Pluspetrol se ha comprometido a proporcionar un mínimo de 120 millones de pies cúbicos de gas (aproximadamente el 10% de su capacidad) para asegurar el suministro eléctrico, el COES asegura que sin una sola molécula de gas no habrá racionamiento, salvo en la central Independencia, de menor envergadura.

Según el COES, el único efecto negativo en el sector eléctrico será el incremento inusitado en los costos marginales (precio spot) debido al empleo del diésel, insumo caro y contaminante. impacto en la industria. Daniel Cámac, deputy country manager de Engie, explicó que las principales perjudicadas serán las empresas de generación eléctrica, las mineras y las industrias. Engie se vería obligada a comprar energía a US$160 o US$180 MW/hora, cuando hoy la adquiere a US$8.

Por su parte, los distribuidores de gas natural aseguraron que no interrumpirán su suministro.